viernes, 9 de abril de 2010

Nueva York

Precipicios de piedra,
gargantas de sombra hacia el cielo,
caleidoscopios de furia audiovisual,
la desintegración de la mente moderna,
selva mineral presionando
la abstracción ortogonal
de un desierto verde,
bosque cristalográfico
bajo una lluvia de líneas punzantes
que se clavan euclídeas en el hormigón.
Nubes paseándose entre prismas,
los haces de luz perdiéndose en las esquinas,
reflejos resonando
en las facetas del mediodía,
la tarde consumiéndose ardiente sobre el mar.
La indiferencia desterrada,
la conciencia fragmentada
en la maraña oscura
de un cuadro de Pollock,
derritiéndose lentamente
sobre los doce compases
de una canción de blues.

2 comentarios:

Dr. Zoidberg dijo...

Me recuerda perfectamente el ambiente de NY... muy buena!

k. dijo...

¡Muchas gracias, Martin!